Hoy os traemos un nuevo capítulo del podcast de Beta privada. En este capítulo contamos con la presencia de @miopepensativo, con quien conversamos sobre la creciente sensación de agobio que se asocia cada vez más a la tecnología y “la vida simple” como respuesta.
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Como siempre, estaremos encantados de conocer vuestras impresiones sobre todo lo que comentamos en este capítulo.
Duración: 73 minutos
22 febrero, 2015 — 10:45 am
Buen podcast, ameno e interesante. Se me ha hecho corto.
Permitidme símil futbolístico aprovechando el número 5 del podcast: parar, ver y repartir juego eligiendo la mejor opción; prisas las justas y necesarias.
Me ha gustado, gracias.
23 febrero, 2015 — 8:00 am
Buena analogía Héctor.
Esa es la idea, perfecto símil. Entre todos tenemos que aprender, a ver si nos da tiempo en esta vida.
Gracias por pasar a comentar, sabes que lo apreciamos muchísimo.
22 febrero, 2015 — 10:55 am
Chicos, me ha gustado mucho el podcast, hilando un poco con lo que tratáis, ha sido como tomarme un café con vosotros, pero frente a mí y a mi taza estaba el iPad mini y no 3 personas y sus gestos y miradas.
La sobresaturación (y ojo al detalle de que ya haga tiempo que digamos “sobre-” y no “saturación” simplemente) es un tema recurrente desde hace un tiempo al menos entre nosotros, twitófagos, blogófagos y demás especies de esta virtuosfera de las redes sociales. Es algo que percibo incluso en mi TL, muy restringido y que ni debería ser reflejo de estas cosas, y sobre lo que personalmente he escrito varias veces y he hablado incluso sin venir a cuento, porque al final el tema salía. Generalizar es injusto, pero creo que en esto hay cierto ciclo que se cumple en las personas que, por gusto y afición, empiezan tonteando con esto, con la info, con la tecnología: llega un momento en que te engancha y se come tu tiempo a bocados a veces de manera implacable como Homer cuando se come un bocata. Entonces has de coger fuerte ese timón que ha empezado a girar intensamente y pararlo, y dirigirlo tú como habías hecho hasta el momento. Se puede, otra cosa es que queramos. Aquí hay algo que siempre matizo cuando se nos pone a la gente que somos muy activas en Twitter u otras redes: las relaciones personales no se pesan, no se cuantifican, ni se clasifican según la distancia o el tiempo, y el 2.0 es un portal directo a encontrar gente afín (o no tanto) que acaba ocupando un lugar importante en tu vida, en tu mente, tanto que tu vida social cambia, porque por tiempo y por tranquilidad, seleccionas. Tu abanico de relaciones es “en directo” y virtual, y parte de tu tiempo online es para esto, para ver los pies en el metro de Malicunda, para saber que Blai ha asaltado su despensa del pecado (de chocolate, malpensados ;P), para leer los posts personales que tan a gusto devoro. Lo malo es cuando se pierde la noción de la vida “en directo”, y se le cierra la ventana, y casi lo mejor que te puede pasar es que te sobresatures pronto para hacer “click” y replantearte las cosas (tu tiempo, tu rumbo, tu vida) antes de convertirte en una marioneta de la actualización de TL o en una hiena de los “me gusta”, eso no es sano, no lo es ninguna adicción. Por suerte p por desgracia, hablo desde la experiencia, y posiblemente sin que fuese mi intención habréis percibido alguno de estos momentos de saturación personal.
En cuanto a la información, definitivamente no soy carne de lector de feeds. Yo sí predico con la teoría de que “Al final la info que te interesa te acaba llegando” con “peros”; según lo que filtres, lo que te puede pasar es que no te enteres de las cosas y no seas consciente de que te pierdes contenido que te puede interesar. Aún así, distribuyo mi tiempo de lectura entre trabajo y personal, y por ahora no me da para más y, a nivel tecnológico, sigo felizmente sin recordar ni conocer los nombres de los gurús que “marcan tendencia” y evito lo que yo suelo catalogar como “la tontería”. Influye el hecho seguir a las personas cuya escritura me gusta y, a nivel relativamente laboral, ir a las fuentes que me gustan o sirven. En este sentido, en el de escribir para publicaciones tecnológicas, me he sentido bastante identificada con algunas cosas que habéis apuntado: personalmente consumo esta info por personas, según quién escribe, por los toques que dan a la información (no son fotocopiadoras y reflexionan), y por ahora tengo suerte de poder hacer eso mismo y ganarme algo. Escribir y fotografiar me gusta y me relaja per se (mucho), y si a esto añades la sensación de “trabajo hecho” es especialmente gratificante cuando hace más de un año que no tienes una jornada que cumplir y haces lo que te gusta aunque no te reporte un sustento para vivir.
(Menudo tochaco, xD) Al final, la Vida Simple™ debería ser la definición de vida en sí, puede que lo fuese al menos connotativamente pero se haya desvanecido con la vertiginosa velocidad y radicalidad con la que ocurre todo. Pero creo que el equilibrio, aún dedicándote a esto, existe y es más fácil de lo que creemos. Podemos aprovechar nuestros dispositivos al máximo sin dejar de aprovechar las cosas con las que nacemos, como la boca (para hablar, masticar, saborear, deglutir…), las manos o los ojos. Algo que repito de vez en cuando: la tecnología a nosotros y no nosotros a la tecnología. Y hakuna matata.
23 febrero, 2015 — 8:07 am
Bueno, desde luego tu comentario es el mejor regalo que podemos tener. Es demasiado jugoso como para no ponerle un marco bonito y colgarlo en la pared de nuestro blog. Aquí quedará para leer y releer cuando nos acordemos de este podcast 5 con el devorador de pecados de chocolate.
Tocas las dos cosas que desde mi punto de vista son a día de hoy nuestra tabla de salvación. Las personas que encuentras en la vida 2.0 y que se convierten en especiales, pasando a un plano muy importante de tu desarrollo como persona y los reductos tecnológicos en los que todavía se puede leer algo que te permita poder pensar, que no manipule tu mente el escritor, sino que la reactive y con personas y letras poder seguir elaborando tus propias reflexiones y tener tu pensamiento propio. Tener pensamiento propio y ser capaz de elaborar ideas que exponer a los demás es el bien más preciado que podemos tener como personas. No todo el mundo es consciente de esto, pero lo has reflejado en tu comentario demasiado bien. Un placer enorme que pases, comentes y nos hagas pensar.
Gracias.
22 febrero, 2015 — 7:03 pm
Buen podcast cargado de frases para enmarcar. Buen trabajo.
Sólo comentar que en los centros de educación no se enseña a gestionar . Y esto es un problema para una parte de la población.
Tras este podcast voy a planificar Mejor mi tiempo.
Un saludo!
Continuad, cuando querais, pero continuad.
23 febrero, 2015 — 7:59 am
Muchas gracias por tu comentario y por ser un fiel seguidor. Nos encanta que estés siempre ahí.
Anotas una cuestión vital que no nos enseñan en la educación actual, la gestión. Luego en la edad adulta echamos mucho de menos el tener unas nociones básicas de cómo organizar el trabajo, nuestas actividades o nuestra vida personal incluso.
Pensar ya es algo que a nivel educativo debería de ser reforzado, no pensamos y eso se nota mucho en la sociedad en la que vivimos.
Alguien que no piensa es alguien manipulable. Y así nos va.
23 febrero, 2015 — 11:48 am
Plas, Plas, pedazo de podcast señores. Para escucharlo e ir anotando una a una las cosas que realmente deberían importar y las que habría que descartar.
En mi caso, en reuniones familiares (las cuales van desde tomar un cafe con ‘la mitad’ a juntarnos unos cuantos), juntarnos amigos o reuniones sociales, la norma que aplico es: iphone fuera de la habitación o iphone al bolsillo, y de ahí no sale aunque no pare de moverse.
1000 Felicitaciones a MiopePensativo, un crack en su momento y un tipo muy respetable ahora.
Interesante término ese de La vida simple, el cual desconocía de su existencia y sobre el que voy a investigar.
De nuevo, 1000Tx por este pedazo de podcast, uno de los más tecnológicos que os han salido últimamente, pero para que nos demos cuenta y pongamos cada cosa en su sitio
Saludos y gracias de nuevo por vuestro tiempo
P
25 febrero, 2015 — 10:34 am
Hola, solo comentaros que me ha gustado el tono del podcast, si bien he echado de menos algo tan sencillo como insistir un poco en la idea de que cada uno haga lo que quiera.
El downshifting como tendencia que estuvo tan de moda en los 90, y que entiendo es exactamente lo mismo que lo que llamas en el podcast Vida Simple, no es mas que una opción como lo pueda ser integrarse en una comunidad Amish en Pensilvania.
Lo importante es que cada uno haga lo que realmente quiere hacer como resultado de una reflexión, en ningún caso una opción es objetivamente mejor que la otra. La evangelización de una u otra manera de vivir siempre me ha sonad0 a vacía autoayuda.
Por otro lado decir, que me apunto al optimismo de Serantes, estamos aprendiendo a vivir con tanta tecnología e información. Todos los grandes cambios requieren de adaptación (pensemos en la revolución industrial) y la revolución de internet que estamos viviendo no es diferente en ese sentido.
A seguir así.
25 febrero, 2015 — 10:42 am
Me extraña que digas eso ya que no tengo la sensación de que en ningún momento hayamos pretendido convencer a nadie de nada sino más bien contar nuestras impresiones. En cualquier caso, eso de «que cada uno haga lo que quiera» va siempre implícito en nuestros podcast, ya que si en algo insistimos es precisamente en la necesidad de que cada uno tenga su propio criterio y que no acepte sin más el de otros.
Creo que hablo por los tres cuando digo que realmente no proponemos una renuncia a la tecnología, pero sí un uso mucho más responsable y consciente. Por mi parte, desde hace un tiempo estoy intentando «mariposear» menos con pruebas interminables de hardware y software pero con el objetivo de usar más y sacar más partido a lo que ya tengo.